Cómo dividir las margaritas de Gerberas
Cómo dividir las margaritas de Gerberas
Las margaritas de Gerbera producen grandes y coloridas flores que se multiplican y se extienden rápidamente, convirtiéndolas en una gran adición a su jardÃn de flores. Sin embargo, si no se diluyen correctamente, pueden atrapar el exceso de humedad, lo que provocará la pudrición de las raÃces. Para obtener el máximo disfrute de sus flores, sus margaritas de gerberas deben ser divididas a finales del otoño o principios de la primavera cada 1 ó 2 años para mantenerlas creciendo y saludables.
Separe las secciones individuales con las manos. Habrá múltiples coronas â" la sección donde el tallo se une a las raÃces â" conectadas entre sÃ. Separe suavemente las secciones una de la otra; al separarlas se puede dañar el sistema radicular. Cada sección que separe debe contener al menos un tallo y las raÃces adheridas.
Guarde las margaritas en macetas en un ! área parcialmente sombreada durante 2 a 3 semanas. Después de las primeras semanas, las margaritas en maceta pueden ser trasladadas a pleno sol siempre y cuando la temperatura no supere los 24 °C (75 °F). Para temperaturas más altas, es mejor mantener las margaritas en áreas de sombra parcial y/o luz solar indirecta.
Prepare su área de trabajo. Llene un cubo grande con agua y lejÃa mezclada en una proporción de 15:1. Llene un segundo cubo con agua corriente. Tenga listo un recipiente de hormona de enraizamiento. Tenga a mano una bolsa o caja para desechar el material vegetal adicional.
Riegue sus plantas cada 3-5 dÃas hasta que las margaritas se restablezcan. El suelo debe permanecer húmedo, pero no empapado. La mejor manera de saber con qué frecuencia regar las margaritas es revisar la tierra y las plantas con regularidad. Si el suelo se ve o se siente seco, o si las flores u hojas comienzan a marchitarse, es hora de regar. Si la tierra aún está h! úmeda, vuelva a revisarla al dÃa siguiente.
Utilice un! a pala para desenterrar toda la planta. Recoja un área alrededor de la planta que sea alrededor de 4 pulgadas (10 cm) más ancha que la base. Asegúrese de cavar lo suficientemente profundo como para jalar hacia arriba toda la corona y el sistema radicular. Sacuda todo el exceso de tierra.
Sumerja las raÃces de cada nueva sección en la solución de blanqueador y luego enjuague. Esto es especialmente importante si va a plantar las margaritas en macetas o volver a plantarlas en un nuevo lugar. La solución trabaja para matar hongos y enfermedades para que no se transfieran al nuevo espacio.
Cave un pequeño agujero en el suelo para replantar las margaritas en su jardÃn. Use una paleta de jardÃn para cavar un pequeño hoyo lo suficientemente profundo como para cubrir las raÃces. La corona debe permanecer a nivel de la superficie del suelo para obtener suficiente aire y evitar demasiada humedad.
Recorte las raÃces de cada nueva sección de modo que mida! n aproximadamente 3 pulgadas (7,6 cm) de largo. Use tijeras limpias o un cuchillo afilado, y tenga cuidado de no tirar demasiado fuerte de las raÃces.
Retire todos los tallos de las flores, los brotes, las raÃces muertas y las hojas viejas o descoloridas. Después de que usted haya quitado todas estas partes, usted debe quedar sólo con hojas verdes, sanas y raÃces blancas. La nueva sección de plantas se verá delgada, pero recuerde que cada una crecerá hasta convertirse en una nueva planta.
Sumerja las raÃces de cada nueva división en la hormona de enraizamiento. La técnica es la misma tanto si se utiliza una hormona lÃquida o en polvo, como si se utiliza una alternativa natural. Simplemente sumerja las raÃces en la solución para cubrirlas. Agite cualquier exceso de polvo o lÃquido.
Plante las margaritas en tierra en macetas si desea mantenerlas en interiores o en un patio. La maceta debe tener al menos 5 pulgadas (13 cm) de diámetro. Elija u! na maceta que drene bien para ayudar a evitar la humedad excesiva y la ! pudrición de las raÃces. Si es posible, use una mezcla de alta calidad para asegurar que su planta tenga el nivel apropiado de nutrientes y estimular el crecimiento.